El Sevilla cayó derrotado en su debut en el Sánchez Pizjuán de forma cruel y un tanto injusta. Los de Pimienta no pudieron traducir el dominio en goles y su rival, que tiene una plantilla mucho más compensada, solo tuvo que ser puntual y certero. Vuelve a las andadas un Sevilla que empieza a ser perdedor y que no parece recuperar ese gen ganador competitivo que lo caracterizara otrora.
SEVILLA FC: Nyland, Carmona, Badé, Kike Salas (Marcao, minuto 75), Pedrosa, Agoumé, Saúl, Juanlu (Sow, minuto 70), Ocampos (Jesús Navas, minuto 86), Lukebákio (Ejuke, minuto 70) e Isaac (Iheanacho, minuto 75).
VILLARREAL: Diego Conde, Kiko Femenía, Bailly (Albiol, minuto 83), Kambwala, Sergi Cardona, Santi Comesaña (Dani Parejo, minuto 72), Pape Gueye, Akhomach (Yeremi, minuto 72), Baena, Pépé (Barry, minuto 65) y Danjuma (Ayoze, minuto 65).
GOLES: 0-1, minuto 1: Danjuma. 1-1, minuto 45+6: Lukebakio. 1-2, minuto 95: Ayoze.
Árbitro: Díaz de Mera Escuderos, manchego. Amarillas para Baena, Isaac, Danjuma, Carmona, Bailly, Agoumé, Ayoze y Dani Parejo.
Incidencias: Estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante 31.000 espectadores
El Number 1 del partido: Saúl
No hay manera de que el Sevilla sea un aliciente para los suyos. Se empeña en frenar en seco cualquier atisbo de ilusión y ya es el tercer año consecutivo que se ven costuras demasiado descaradas. En esta ocasión es justo decir que fueron más los defectos individuales y defensivos que la sensación global, pero el equipo hispalense volvió a caer, se dejó un punto que era prácticamente suyo y, de nuevo, empieza con el pie torcido la temporada.
Los minutos iniciales fueron ridículos de los hispalenses, muy superados por un Villarreal que vio espacios por todos lados y que tras anotar en el primer minuto, pudo hacer sangre. No lo hizo y el Sevilla se recompuso. Con personalidad y una idea clara y ofensiva que hizo de la presión alta su mejor arma. Poco a poco fue arrinconando al Villarreal, que apenas salía de su campo, para acabar siendo protagonista y merecer el empate mucho antes de lo que llegó.
Primero Juanlu vería como se le anulaba un gol por fuera de juego que fue un primer aviso de Isaac, que estuvo muy activo pese a no marcar. También Saúl, cuyo debut ilusiona, acaparó balón y mostró su dinamismo. Robaba bien y alto el Sevilla, pero no terminaba de culminar hasta que Lukebakio lo haría al filo del descanso. Gran pase de Ocampos en largo y mejor definición del belga, que, hasta ese momento, solo era fuego de artificio.
En la segunda mitad siguió siendo dominador, pese a que cada vez que el Villarreal encontraba espacios hacía daño a la zaga sevillista. Ofensivamente el equipo de Pimienta se organizó bien y atacó con sentido, pero sus lagunas llegaban en acciones individuales con fallos de pases cortos que impedían mejores acciones. Con todo ello, tuvo que aparecer Diego Conde para salvar a los amarillos, sobre todo en una muy clara de Isaac y una falta directa que iba a gol de Saúl.
Los cambios sentaron bien al equipo, especialmente el de un Ejuke muy eléctrico que acaparó protagonismo en banda y que generó mucho peligro. Iheanacho, que entró por Isaac, también tendría una clara, pero iba a ser el Villarreal quien tras un error defensivo, anotaría el tanto de la victoria. Ayoze, aprovechando un error de Marçao y Carmona, daría la victoria a los castellonenses. Un duro golpe que será complicado de digerir.
Fotos: @perezventana
