La corredora holandesa Marianne Vos se ha proclamado campeona del mundo de fondo en carretera en la categoría femenina en los mundiales de ciclismo que se están celebrando en su país desde el pasado Domingo en una auténtica exhibición de poderío, clase y saber gestionar una carrera de un día cómo en el fondo es un mundial de ciclismo.
Era la gran, casi la única favorita. Y ha dado buena prueba de ello dominando una carrera que partió tranquila en su inicio, pero que se dinamitó en las últimas cuatro vueltas. Precisamente a falta de tres, Vos lanzó un ataque bestial en el Cauberg, logrando empalmar con una facilidad asombrosa con las corredoras que iban en fuga, entre ellas una compañera de selección. De ahí al final, cada paso por el Cauberg fué un recital de la corredora holandesa hasta que en la última se deshizo sin ningún tipo de problemas de las cuatro compañeras de fuga que aún le aguantaban y entró en meta en solitario, hasta le dió tiempo de coger una bandera de su país para entrar en meta a lo grande. La australiana Rachel Neylan consiguió la plata y la italiana Elisa Longo el bronce. Ana Sanchis fue la mejor ciclista española entrando en el grupo y en la posición 29ª. La campeona Holandesa redondea un año histórico, habiendo ganado el Giro femenino, los Juegos Olímpicos y ahora el mundial. Es el segundo que consigue. Fue campeona en 2006, y desde entonces 5 platas hasta hoy. Éxito sin precedentes de la actual reina del ciclismo femenino. Y pasadas ya las pruebas en ruta en categoría Junior femenina, Sub 23 masculino y Élite femenina, para el Domingo quedan las pruebas Junior masculina, que se disputará mientras los profesionales cubren los primeros cien kilómetros fuera del circuito, y la susodicha prueba estrella de éstos mundiales, la de la ruta de los profesionales masculinos. Aquí es donde depositamos todas nuestras ilusiones de conseguir traernos para España la túnica sagrada del ciclismo, el maillot arco iris. Varias son las balas que tenemos para intentar el asalto a un camponato que entre 1995 y 2004 vencimos en cinco ocasiones. Una de Olano, tres de Freire y otro título para Igor Astarloa. Desde entonces, una plata de Alejandro Valverde en 2005, y dos bronces conseguidos por el mismo Valverde en 2006 y Purito Rodriguez en 2009. Hay versiones muy contradictorias en cuanto al recorrido. Sobre el papel, viendo el perfil asusta. Hay que completar ni más ni menos que 265 kilómetros, de los cuales los primeros cien no son en el circuito final. En ésos primeros cien, hay que subir hasta siete pequeñas pero duras cotas. Y después el circuito. El famoso circuito de Valkenburg que consta de poco más de quince kilómetros. Ahí, en cada vuelta,hasta completar 165 kilómetros más hay que subir el Bemelerberg 900 metros al 5% de media y el Cauberg 1200 metros al 5.8 %. De ahí a meta apenas dos kilómetros más. Y decía lo de contradictoria porque están llegando a meta en las pruebas en línea grupos muy numerosos, en categorías donde normalmente suelen llegar casi de uno en uno debido a que se corre continuamente a palos. Por lo tanto sólo caben dos opciones; o se ha corrido con excesivo respeto al circuito, o el circuito no es tan duro como lo pintan. Si la opción verdadera es ésta última, malo para nosotros, que necesitamos dureza para que cualquiera de nuestros potenciales ganadores de la estocada final en la meta.